Señor Jesús,
Tu que me has dado este aviso de
«Estar siempre listo»
y me has hecho la gracia de escogerlo por divisa,
concédeme a cumplir con el:
que todas las circunstancias de la vida
me hallen listo para el deber,
amando lo que es verdadero,
haciendo lo que es bueno,
fiel a la Iglesia y leal a la Patria,
siempre listo a perdonar,
siempre pronto a socorrer,
alegre y sonriente en el sufrir,
casto y puro de corazón.
Estas son, Señor, las huellas de tus pasos;
yo quiero seguirte a través de todo
sin miedo y sin tacha,
el alma fuerte y la frente levantada.
Esta es mi promesa de cristiano y de Scout.
por mi honor no la traicionare jamás,
confiando, Señor, en tu bondad y en tu gracia
para toda la eternidad, así sea.